SAN CRISTOBAL DE LAS CASAS
Enclavada en una hermosa zona de la meseta conocida como San Cristóbal y que forma parte de las montañas del norte de Chiapas, se encuentra San Cristóbal de las Casas. Hacia 1524 el capitán Luis Marín intentó conquistar la región, pero al encontrar una férrea resistencia de los indígenas optó por la retirada sin dejar establecido ningún asentamiento para colonos españoles.
Posteriormente, con la misión de pacificar el área en forma definitiva, las autoridades virreinales envían al capitán Diego de Mazariegos, quien ataca a los indígenas en la célebre batalla de Tepechtía, en la que los chiapanecos prefirieron arrojarse al Cañón del Sumidero antes de sucumbir ante los españoles. Más tarde, en el trayecto de un viaje que Mazariegos efectuaba entre la región de los Llanos y Chiapa, pasó por el valle de Hueyzacatlán, vocablo que en lengua náhuatl significa tierra de zacate grande.
En su calidad de capitán general de la provincia y teniente de gobernador por el rey, funda allí el 31 de marzo de 1528, la población de Ciudad Real, llamándola así en memoria de su ciudad natal en España.
Más de 400 años debieron transcurrir para que aquel antiguo asentamiento cambiara su nombre por el de San Cristóbal de las Casas, en honor de fray Bartolomé de las Casas por su extraordinaria labor en defensa de los indígenas. De los muchos personajes que estuvieron involucrados en la Fundación, cabe mencionar al propio Diego de Mazariegos, a los alcaldes Luis de Luna y Pedro de Orozco; los regidores Pedro de Estrada, Francisco Gil, Francisco de Luitorre, Alonso de Aguilar y al teniente gobernador de la villa, don Alonso de Estrada. Su edificación siguió un proceso similar al de otras ciudades coloniales que se crearon en el territorio novohispano. En primer término se trazó la plaza principal, a cuyo entorno se designaron los lugares que ocuparían la Catedral y los edificios públicos con sus calles aledañas.